Un caso de desarrollo electrónico local
Fate es la sigla de la Fabrica Argentina de Telas Engomadas. Todos la conocemos por ser la principal productora de neumáticos en Argentina. Esta empresa fue fundada en 1940 por el inmigrante polaco Leiser Madanes. Pocos lo saben, pero la División Electrónica de Fate fue un verdadero caso de desarrollo electrónico local y competente.
Durante la década de 1970 se dedicó al desarrollo de calculadoras electrónicas. Por ese entonces el ingeniero Manuel Madanes se encontraba a cargo del área tecnológica de la empresa. El matemático Manuel Sadosky (quien trajo a Clementina, la primera computadora de la Argentina) lo alentó a crear la Gerencia de Investigación y Desarrollo de FATE. Sadosky recomendó también al físico y astrónomo Carlos Varsavsky como gerente.
En 1969, la División Electrónica buscó desarrollar tecnología nacional y convocó a profesionales de la Facultad de Ingeniería de la UBA, sobre todo a aquellos que habían trabajado en el desarrollo de la Computadora Experimental de esa Facultad. Algunos eran miembros del Instituto de Cálculo, creado por Sadolsky.
Desarrollo de productos de alta calidad
Desde el año 1971 a 1976, se fabricaron varios modelos de calculadoras que debían cumplir condiciones: que se crearan sin copiar otros modelos, sin licencias y que el desarrollo de sus componentes sea completamente local y por otro lado que sean productos complejos, para evitar copias de los mismos.
Estos productos que debían competir con los productos de la marca Olivetti de gran distribución en el país, llegando exportarse el 30% de su producción a Europa.
Esta División desarrolló máquinas de registro directo, con microprocesador y lectoras grabadoras de diskette y, además, un prototipo de computadora, la de la Serie 1000. Si bien la División Electrónica de Fate fue un llamativo caso de desarrollo electrónico local, pretendía avanzar en la creación de una computadora argentina. Este proyecto fue perdiendo fuerza ya que, si bien el desarrollo de hardware estaba muy avanzado, el del software parecía más complicado. Todo indicaba que podía lograr salir al mercado, pero a partir de 1976, la dictadura argentina decretó el cese de apoyo económico y la apertura de importaciones, dos golpes fatales al desarrollo de esta industria
No hay imágenes de este prototipo, pero me imagino que habrá sido algo parecido a esto:
Más info en: El caso FATE